Nicolás Durán de la Sierra
Este próximo 2 de junio ciudadanos de varias entidades del país, entre ellos los de Quintana Roo, acudirán a las urnas para elegir alcaldes o como en nuestro caso, para renovar sus legislaturas, lo que es un decir dado que ya se permite la reelección de diputados. Estas elecciones, por lo menos en el ámbito local, apuntan para ser una ensalada política de lo más extravagante.
En virtud de que el llamado ‘efecto López Obrador’ sigue con viento en popa, es probable que la tropa de ilustres desconocidos que compiten bajo la insignia de MORENA se alcen con la más de las diputaciones, pero pese a ello se aprestan a contender en la jornada electoral algunos no tan ilustres políticos del patío, precisamente los que dan el toque de extravagancia a la ensalada.
Se advierte que la voz extravagancia se utiliza aquí con el sentido de rareza no con el de ridiculez, aunque el lector bien puede usar la definición que guste. El caso es que en junio tendremos una nueva fiesta de la democracia en la que la oposición integrada por el PAN y el PRD, ganaran con esfuerzo –es un decir- algunas diputaciones plurinominales, que algo es algo.
El PRI también estará presente, claro, pero sin miga ya que parece andar de luto. El aderezo de la ensalada lo servirán nada menos que el revivido Juan Ignacio García Zalvidea, elChacho, que ahora luce la camiseta del Movimiento Ciudadano y José Luis Chanito Toledo, de la misma marca, que hoy jura por Dios y todos los santos que no es de Cancún sino de Playa del Carmen.
El aderezo también lo servirán Haydé Saldaña, en lugar de Julián Ricalde, al que bajaron del tren a última hora; y don Gregorio Sánchez Martínez, el Aleluyo, excapitán del hundido Partido Encuentro Social, que ahora va por el III Distrito con la bandera del PRD, partido que devino en recicladora del PES, claro, tras un jugoso estipendio espiritual, no se vaya a pensar mal.
Los del Partido verde pues… Pues sus socios van por la vida cual canes sin amo luego de que Morena se echara para atrás en la coalición electoral. Dicen que su meta ya no es lograr diputaciones, que va, sino tan sólo no perder el registro… En fin, como se dijo, la del próximo junio en Quintana Roo será una jornada electoral por lo menos divertida y extravagante.
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